La matrícula de cada periodo académico da derecho a dos convocatorias, una ordinaria al final del cuatrimestre y una extraordinaria en la que se puede recuperar (sería el equivalente al tradicional examen de septiembre). Los exámenes son presenciales u online (según decida el alumno) y obligatorios, siendo imprescindible aprobarlos para poder contar con la puntuación de la evaluación continua. Esta puntuación se guarda para la convocatoria extraordinaria del mismo curso académico, pero no para el siguiente.
Las actividades de evaluación continua deberán realizarse y entregarse dentro del periodo de formación ordinario. No se admitirá la entrega de actividades en el periodo de evaluación extraordinaria, salvo que, excepcionalmente, esté previsto en la memoria del estudio.
Para superar cualquier asignatura es condición “sine qua non” el haber superado el examen final: en caso contrario no se hará la ponderación con la nota obtenida en la evaluación continua.
El estudiante que no apruebe la asignatura en la convocatoria ordinaria (ya sea por no superar el examen, ya sea por no alcanzar la calificación suficiente para superar la asignatura), podrá volver a realizar el examen correspondiente en la convocatoria extraordinaria